DEJAD QUE LOS NIÑOS VENGAN A MI (Mc. 10, 2-16)

El evangelio de hoy es una invitación a cuidar a la familia como regalo precioso de Dios.
Los niños deben sentir el amor de Jesús
a través de sus padres.
Lamentablemente, muchos matrimonios, por diversas razones, no han sido capaces de vivir este don en plenitud.

Señor Jesús, te pedimos por todos los matrimonios para que tu misericordia llegue a todos los que están experimentando, o han experimentado, dificultades matrimoniales.

Para Reflexión:

  1. A Jesús le preguntan sobre el divorcio , y Él recuerda: todos tenemos la misma dignidad, hombres y mujeres.
    Durante este tiempo de pandemia muchas mujeres, niños y mayores han sufrido violencia y maltratos.
    ¿Me he preocupado por ellos?
  2. ¿Cómo he sido testigo de la misericordia del Señor con las personas rechazadas?
  3. ¿Recibo el Reino de Dios con total apertura como los pequeños, rechazados los débiles?