Guiados por el Evangelio, por la Luz de Jesús Resucitado.
Escuchemos su Palabra y aliméntemonos del Pan partido y compartido.
Oro para que me sea dada la gracia de sentir arder mi corazón a su Presencia.
PARA REFLEXIÓN:
- ¿He tenido un encuentro personal con Jesús? ¿Me ha ardido el corazón?
- ¿Ese encuentro gozoso me llevó a profundizar en mi fe? ¿Lo traslado a mi vida diaria?
- ¿Encuentro a Jesús en la Eucaristía, lo llevo vivo a los demás?
