Nuestra oración debe ser humilde, perseverante, confiada y paciente
PARA REFLEXIÓN:
- ¿Soy consciente que la salvación es para todos sin excluir a nadie?
- ¿Cuando oro y pido al Señor, asumo una actitud de súplica, perseverante, humilde y confiada?
- ¿Tengo la fe de la mujer Cananea, o ante las dificultades dudo, tengo miedo, pierdo la fe?
- ¿Pido al Señor en mi oración que acreciente cada día mi Fe?
