NO OLVIDEMOS EL VALOR DE LA HUMILDAD (Lc.14, 1.7-14)

La humildad es el primer grado de una seria vida cristiana.

PARA REFLEXIÓN:

  1. ¿En qué oportunidades he reconocido la dignidad de las otras personas y me he colocado a su servicio (generosidad) sin esperar ningún pago ni recompensa a cambio?
  2. ¿Con quiénes puedo ahora ser más generoso sabiendo que nunca podrán retribuirme? ¿Qué cambios necesito hacer en mi vida?
  3. ¿Cómo reconozco que necesito de Dios su gracia, que recibo su amor su Misericordia y que es el centro de mi vida?