Cuando comemos el Pan y el Vino de la Eucaristía, nos hacemos responsables de ser solidarios con los demás.
Señor, que tu Eucaristía y tu Palabra sea nuestro alimento que nos ayude a ser personas generosas y felices de compartir.
Para Reflexión:
- ¿Vives esta Palabra de Jesús? , el que cree en mí no pasará hambre, el que cree en mí no pasará sed. ¿Qué experiencia de esto tienes en este último año?
- Los cristianos debemos dar pan a los que tienen hambre. ¿Cómo he respondido de este mandato en este último año? ya sea con pan, trabajo digno y bien remunerado, contribuyendo a una sociedad más justa y equitativa.
- No basta el pan material sino aquel que da la vida eterna. ¿Con mi estilo de vida he contribuido a que otras personas se encuentren con Jesús?