Jesús nos enseña que es necesario sólo un poquito de fe para lograr grandes cosas que aparentemente serían imposibles.
PARA REFLEXIÓN:
- ¿Al vivir lo que el Señor me pide, me confío solo en su voluntad o sobre todo en su Gracia?
¿Reconozco que tanto el querer como el obrar es Gracia? - ¿En qué parte de mi vida, o que es lo que me pide el Señor que haga su voluntad y que necesito de su Gracia?
- ¿Hay algo extraordinario o fuera de mi alcance que el Señor me está pidiendo que haga, como decirle al árbol arrancate y ponte en el mar?