VAMOS A PREPARAR EL CAMINO DEL SEÑOR ( Lc. 3, 1-6)

Necesitamos allanar, preparar los caminos del Señor para que queden limpios.
Tener fe que Cristo llega en cualquier momento y tenemos que estar preparados
para que nos encuentre con el alma limpia.
Allanar, rebajar las colinas de nuestro egoísmo, prepotencia, envidias, criticas consumismo, etc. para abrir los caminos y elevar valles de la confianza, solidaridad, generosidad, del servicio hacer el bien, y así encontrarnos con El Salvador.
Vivir con integridad afinando nuestro ser Cristiano, que nuestro amor siga creciendo más y más, esperar a Jesús invictos e irreprochables.

Para Reflexión:

  1. En este año Litúrgico que ha transcurrido
    ¿Qué sendero he allanado? ¿Qué valle he elevado?
  2. ¿Qué puedo hacer para alimentar mi amor y conocimiento de Dios?
  3. ¿Qué propósitos y efectivos cambios me pide el Señor para poder ver la Salvación de Dios?

VIVAMOS ATENTOS Y PREPARADOS, YA LLEGA EL SEÑOR (Lc.21, 25-28, 36-38)

1er Domingo de Adviento
Tiempo de Espera y de Esperanza.

El evangelio de Lucas nos invita a mantenernos fieles y vigilantes, alertas con un corazón libre de temores, despiertos y en oración .

Señor, que tu venida sea un evento glorioso y redentor. Que podamos vivir vigilantes sin temores, de manera que cuando llegues nuestro corazón se llene de gozo y podamos gritar para aclamarte : ¡ Llévame a casa Señor !

Para Reflexión:


1) ¿Cuál es nuestra disposición para vivir con intensidad esta semana de adviento y de cara a una nueva navidad ?

2) ¿Es Jesús nuestra esperanza de vida ?

3) ¿Cómo se manifiesta mi confianza en Dios frente al final de los tiempos ?

JESUCRISTO, UN REY QUE SIRVE (Jn.18, 33b-37)

Un reinado que nace entre las espinas y no entre laureles. Un rey que sirve.
Jesús admite que es rey, pero explica su realeza:
Su reino no es de este mundo, su reino es de amor y servicio
Lo que hizo fue ponerse al servicio total del Reinado de Dios, eso fue el centro de su predicación y la causa por la que dio su vida.

Señor, Tú eres el Rey de la Verdad, del Servicio del Amor.
Nosotros queremos seguir tu camino, tu ejemplo. Que sepas que te amamos de corazón y queremos proclamar cada día
¡Venga a nosotros tu Reino!
Porque tuyo es el Poder y la Gloria por siempre.

Para Reflexión:

  1. ¿Recoconozco a Jesús como Rey y Señor de mi vida?
  2. ¿Cómo participo concientemente en la construcción del Reino de Dios?
  3. Jesús reina amando, y así muestra la profunda Verdad que sostiene al mundo y la historia: El Amor de Dios por los seres humanos .
    ¿ Cómo vives esta VERDAD?

JESÚS LLEGA, PREPARÉMONOS PARA RECIBIRLE (Mc. 13, 24-32)

A medida que nos aproximamos al final del año litúrgico, las lecturas nos recuerdan este aspecto de las enseñanzas de Jesús.
Jesús no dice estas cosas para asustarnos, sino para convencernos de la necesidad de estar vigilante, estar preparados.
El día de su venida es el anuncio de la salvación, será un día de gozo más que de temor. Aún así, necesitamos estar alertas para no ser encontrados desprevenidos .

Señor, ayúdanos a vivir nuestro día a día sin temor, por el contrario vivirlo con alegría, amando, sirviendo siendo generosos .

Para Reflexión:

  1. ¿Qué sientes al escuchar esta lectura?
  2. Jesús dice: Nadie sabe ni el día ni la
    hora.
    ¿Cómo te preparas para ese momento?
  3. ¿Puedes pasar del temor a la alegría?
    ¿ Cómo lo haces?
  4. ¿Tienes esperanza? ¿En qué consiste?

AMA Y VIVIRÁS EL REINO DE DIOS (Mc. 12, 38-44)

Quiere esto significar que cuando se comparte con generosidad lo poco que se tiene, parece que se multiplicara.
Dios mira los corazones generosos y su prontitud para dar.
Señor, que cada día sientan mayor compromiso de compartir con generosidad la Palabra y los bienes con los más necesitados.

Para Reflexión:

  1. ¿Damos lo que nos sobra ? O damos lo que necesitamos ?
  2. ¿Queremos siempre los mejores lugares ? O esperamos a que nos indiquen el lugar ?
  3. ¿Qué siento cuando creo que no soy reconocido ?
  4. ¿Cuándo fue la última vez que di todo lo que soy o todo lo que tenía ?

JESÚS EN MÍ, ME MUEVE A AMAR (Mc.12, 28-34)

Jesús nos enseña que la observación de los rituales religiosos es menos importante que el amor a Dios y el amor al prójimo.
Es una elección que hacemos a diario, hoy elijo amar a Dios en mis hermanos, elijo tratar bien a Dios en el más vulnerable y en todos.

SEÑOR, te doy gracias por enseñarme a amarme, amar a los demás sabiendo que no sólo necesito amar a aquella persona que menos quiero, sino que también puedo amar al que lo necesita.

Para Reflexión:

  1. ¿Me amo a mi mismo y amo a los demás como Dios me ama?
  2. ¿A quiénes me cuesta amar?
  3. ¿Si yo no puedo amar, le pido a Jesús que Él ame en mi corazón?

¡ÁNIMO, LEVÁNTATE! JESÚS TE LLAMA (Mc. 10, 46-52)

Conocer a Jesús es un don de Dios y sólo Él nos puede abrir los ojos a la fe.
Bartimeo escucha su voz y lo reconoce como el Hijo de David, es curado y comienza a seguirlo.
Así como a Bartimeo, Jesús nos quiere liberar de nuestras ceguera, de todo dolor y debilidad.
Sólo nos pide ver su persona.

Señor, danos ojos nuevos, esa mirada como la tuya para que podamos ver todo lo bueno, para vernos tal como somos, para verte siempre a nuestro lado y podamos seguirte.
Aumenta la luz de nuestra propia fe

Para Reflexión:

  1. ¿Cómo anda mi ceguera espiritual?
  2. ¿Qué cosas concretas he hecho esta semana que muestran que sigo a Jesús?
  3. Así como Bartimeo pidió:
    ¡Maestro que pueda ver!
    ¿Qué cosas he pedido yo durante los últimos días? y ¿Qué cosas necesito pedir hoy?

EL QUE QUIERA SER GRANDE, SE HAGA SERVIDOR DE TODOS (Mc. 10, 35-45)

Jesús no viene para ser servido, sino para servir. Nos expone su sentido de verdadera grandeza: el servicio y el cuidado de los demás.

Señor, humildemente te pedimos nos des un corazón grande para amar sin miedos, fuerte para luchar y generoso para entregarnos a nosotros mismos como un don a los demás. 
Centrar la propia vida sobre la base del amor-servicio.

Para Reflexión:

  1. ¿En algunas oportunidades actuó como Santiago y Juan, buscando o esperando reconocimiento, privilegio prestigio?
  2. ¿Práctico estas palabras de Jesús?:
    El que quiera ser grande, se haga servidor de todos.
  3. ¿Puedo beber el Cáliz de Salvación? ¿Estoy contento de participar en el sufrimiento de Cristo? (1 Pedro 4, 13).
  4. En la segunda lectura (Hb.4, 14-16) nos dice:
    Jesús Sumo Sacerdote se compadece de nuestras debilidades .
    ¿Me acerco con seguridad a su Trono de Gracia para que me auxilie oportunamente?

DEJAR TODO PARA GANAR EL REINO (Mc.10, 17-30)

El Evangelio de hoy, Jesús propone amar a los demás, respetar su vida y su integridad .
*No dependamos de nuestra propia seguridad.
*Lo que guardamos y no necesitamos, le pertenece al hermano necesitado.
¿Cómo se puede vivir con el desprendimiento que Él propone?
En las palabras finales de este pasaje, Jesús deja bien claro que nuestros propios esfuerzos no nos harán poseer la vida eterna.

Señor, te pedimos la gracia de rechazar lo que se interpone entre nosotros, poder seguirte sin dudas de manera que la vida eterna llegue a nosotros, aquí en la tierra.

Para Reflexión:

  1. ¿Cómo reaccionaría yo ante la propuesta de Jesús? ¿Quedaría triste o feliz?
  2. ¿Yo soy dueño de mi cuenta corriente, o yo le pertenezco a mi cuenta corriente?
  3. ¿Cuál es la relación entre mis propiedades y mis bienes (materiales y espirituales) y la Vida Eterna?

DEJAD QUE LOS NIÑOS VENGAN A MI (Mc. 10, 2-16)

El evangelio de hoy es una invitación a cuidar a la familia como regalo precioso de Dios.
Los niños deben sentir el amor de Jesús
a través de sus padres.
Lamentablemente, muchos matrimonios, por diversas razones, no han sido capaces de vivir este don en plenitud.

Señor Jesús, te pedimos por todos los matrimonios para que tu misericordia llegue a todos los que están experimentando, o han experimentado, dificultades matrimoniales.

Para Reflexión:

  1. A Jesús le preguntan sobre el divorcio , y Él recuerda: todos tenemos la misma dignidad, hombres y mujeres.
    Durante este tiempo de pandemia muchas mujeres, niños y mayores han sufrido violencia y maltratos.
    ¿Me he preocupado por ellos?
  2. ¿Cómo he sido testigo de la misericordia del Señor con las personas rechazadas?
  3. ¿Recibo el Reino de Dios con total apertura como los pequeños, rechazados los débiles?